Esta serie cuenta con 165 volúmenes que abarcan de 1808 a 1876.

Son documentos generados y resguardados por el administrador  de los propios y rentas de la ciudad, quien posteriormente pasó a ser el administrador de las rentas municipales y después el tesorero municipal, por largo tiempo estuvieron depositados en el Archivo General Municipal, donde se fueron acumulando. En la segunda mitad del siglo XIX se dispuso su encuadernación con la denominación Cuentas de la Tesorería Municipal, que es la continuación de la primera serie de los volúmenes llamados Cuentas. La información que contienen es sobre las entradas de recursos correspondientes a diversos ramos de la administración del municipio, como el cobro de rentas de mercados, fincas urbanas, rústicas, diversiones públicas, derechos municipales, multas, pensión de pulquerías, contribución federal, fielato, matrículas, cobro de uno por ciento municipal sobre efectos extranjeros y otros. Por parte de los egresos se encuentran los gastos por sueldos, alumbrado, empedrado, carros de policía, obrería mayor paseos y ornato, cárcel pública, escuelas, patronato de fiestas, vacunas, tribunales inferiores y otros.